Para que un cliente vuelva con frecuencia a tu negocio es necesario que esté satisfecho con tu servicio. Si te sorprende que muchos de los clientes que se acercan a tu negocio ya no regresan, quizá debes poner atención en los detalles más sencillos. Aquí encontrarás consejos útiles y sencillos que la Secretaría de Economía y Emprende con FONAES1 te ofrecen:
- Busca la satisfacción total del cliente
En tu negocio lo más importante siempre será el cliente y debe quedar 100% satisfecho, ya sea que trate contigo, compre tus productos o haga uso de tus instalaciones. Todo puede esperar, pero un cliente ¡nunca!
- Deja tu vida personal en casa
No permitas que tu estado de ánimo o humor afecte la manera en que tratas a un cliente. Todos los clientes esperan ser atendidos rápida y cortésmente.
- Saluda a cada cliente
Sin importar que el negocio esté lleno o que haya poco movimiento, todo cliente debe ser recibido con algunas palabras de bienvenida. Un simple “Buenos días” bastará y con ello, estarás logrando dos cosas:
A). El cliente sabrá que hay alguien ahí para atenderle.
B). Te estarás resguardando contra robos. La gente está menos inclinada hacia robar mercancía si saben que hay alguien que está atento a su presencia.
- Nunca califiques a tu cliente por su apariencia
Recuerda que las apariencias engañan. El hecho de que una persona no luzca como un posible comprador no implica que no pueda serlo.
- Deja que el cliente tenga su espacio
Algunos clientes podrían sentirse incómodos si tratas de acercarte demasiado. Evita llamar a tu cliente “caballero” o “damita”. Está comprobado que estas palabras hacen sentir incómodas a la mayoría de las personas.
- No interrumpas, ¡escucha a tu cliente!
Nunca debes interrumpir a tu cliente mientras está hablando, espera a que termine y entonces sí, expón ese aspecto que sabes que a tu cliente simplemente le va a encantar.
Cuando el cliente está hablando, el cliente está comprando.