EDUCAR EN CIBERSEGURIDAD, IMPERATIVO ANTE LAS NUEVAS AMENAZAS

La Policía Local de Valencia alertó hace unos días de la presencia de un millar de carteristas y descuideros durante las Fallas. Pero los amantes de lo ajeno no solo trabajan a pie de calle; el riesgo está también en una realidad virtual y ficticia cuya seguridad no hay que descuidar todos los días del año.

Vivimos en una sociedad cada vez más digitalizada y conectada a la red que ha provocado que delitos como el «ciberbullying», el «phising» (suplantación de identidad), el robo de contraseñas o el robo de información privada, cada vez sean más frecuentes. Esto que, «a priori», parecía algo más centrado en el ámbito de la empresa se ha extendido a los hogares y es necesaria una concienciación sobre cómo utilizar de forma segura la tecnología para evitar ser víctimas de los llamados ciberdelincuentes.

«Todavía no somos conscientes, pero nuestra información privada vale mucho dinero. Y por eso los delincuentes digitales trabajan y mucho por acceder a nuestros dispositivos, conseguir nuestras contraseñas, nuestros ’emails’, nuestras cuentas en redes sociales y, cómo no, los datos de nuestras tarjetas de crédito que utilizamos en compras ‘online’», asegura José Rosell, socio-director de S2 Grupo, empresa líder el sector.

Conscientes de que se impone la seguridad, S2 Grupo se ha unido a la Falla Chiva-Francisco de Llano a través de una iniciativa pionera para difundir consejos de ciberseguridad que promuevan un uso adecuado de los «smartphones», ordenadores o «tablets», por ejemplo, en las familias y en los colectivos más vulnerables como son los niños y las víctimas de la violencia de género.

Así, el monumento infantil de esta comisión, creado por el artista fallero Salva Dolz, está enfocado en la ciberseguridad y, en concreto, este año tratará un tema esencial como es la ciberseguridad en los hogares.

Porque la tecnología cada vez está más presente en las casas (altavoces inteligentes, televisiones inteligentes, ordenadores, tablets, «smartphones», videoconsolas, tecnología domótica, etc.) y es necesario que las familias conozcan los riesgos que implican y cómo utilizar estos dispositivos de forma cibersegura para proteger su intimidad y patrimonio.

Consejos y errores

«Esta unión de ciberseguridad y Fallas ha nacido con la pretensión de hacer llegar este mensaje al mayor número de personas posible. Las Fallas son un puente excelente para tomar conciencia de los riesgos a los que estamos expuestos y conseguir así, una sociedad más protegida y avanzada», explica al respecto Miguel A. Juan, socio-director de S2 Grupo.

Además, como asegura el presidente de la Falla Chiva-Francisco de Llano, Juan Puig, «con esta iniciativa hemos conseguido que, más allá del aspecto de denuncia que conlleva cada monumento, los niños aprendan con ella y contribuir a difundir el mensaje de que es fundamental utilizar de forma segura la tecnología para no ser víctimas de la ciberdelincuencia».

En España, es el Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe), entidad dependiente del Ministerio de Economía, la que se encarga, a nivel institucional, de programar conferencias y actividades dirigidas a menores, padres, madres y educadores con el objetivo de promover el uso seguro y positivo de las tecnologías digitales.

Desde el Incibe, por ejemplo, se dan consejos sobre los típicos errores que cometemos al crear nuestras contraseñas, a qué edad puede tener un menor su primer teléfono móvil, cómo conocer las riesgos de utilizar el dispositivo de un amigo o evitar el ciberacoso, cómo saber si tus hijos están preparados para tener su primer perfil en redes sociales, conocer los últimos retos virales que circulan por la red, las pautas para conocer si una tienda «online» es fraudulenta o las recomendaciones para configurar las videoconsolas de forma segura.

¿Tú qué ves en internet?

La población infantil y juvenil es el colectivo al que van dirigidas muchas de las campañas del Instituto Nacional de Ciberseguridad. El objetivo es prevenir el acceso de los menores a contenidos inapropiados y reforzar positivamente el uso responsable y equilibrado de la visualización de dicho material. También trata de prevenir los riesgos en los juegos con conexión a Internet y fomentar el respeto y la capacidad crítica en las comunicaciones online. Para ello, por ejemplo, han creado un juego en el que los alumnos deberán asumir el rol de policía, ciberdelincuente, centro de ayuda y jugadores.

 

Marzo – Abril 2019

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