AMABLE, PERO FIRME

Alguna vez se pensó que, únicamente, las grandes industrias requerían contar con personal que resguardara sus operaciones y activos. Ante los niveles de inseguridad que prevalecen en México, la necesidad de contar con seguridad privada, en todo tipo de industrias, es cada vez mayor.

Como actividad esencial, la labor de proteger a una empresa no puede ser desempeñada por cualquier persona. Para que el servicio cumpla con su propósito, es indispensable que se den 3 componentes básicos: un filtro riguroso de la gente, capacitación y supervisión constante, así como un esquema de motivación, crecimiento profesional y empoderamiento de los elementos de seguridad.

En Grupo IPS, los Técnicos en Seguridad Patrimonial (TSP) son capacitados de acuerdo a las necesidades que cada uno de sus aliados comerciales tiene, siempre con la convicción de anteponer la amabilidad y actitud de servicio, incluso, ante situaciones tensas y hostiles. Convertirse en un TSP no significa ser un guardia más; ser un TSP implica desarrollar criterio y capacidad de análisis, comprensión para saber actuar frente a cualquier adversidad y no dejarse intimidar por actitudes ajenas con las que busquen minimizar su labor. Ser un TSP requiere de fuerza, valentía y voluntad, además de disposición para cumplir con las consignas, pero sin perder el tacto ni caer en provocaciones.
Dignificar la labor del guardia de seguridad es una tarea que Grupo IPS ha llevado a cabo desde hace más de 26 años. Este acompañamiento empieza por entender las necesidades que cada uno de los elementos presenta a la hora de cubrir un servicio. Tras años de desarrollo e innovación constante, es una variable que, al día de hoy, se lleva de la mano de todos y cada uno de sus colaboradores, tanto administrativos como operativos. Llegar a las filas de Grupo IPS implica tener la certeza de haber llegado a uno de Los Mejores Lugares Para Trabajar en México, donde están garantizadas las prestaciones desde el día uno, así como el pago puntual de la nómina, acceso a diferentes beneficios y capacitaciones constantes.

Ser un TSP requiere de firmeza, pues la responsabilidad de estar al frente de un servicio implica afrontar diferentes situaciones donde las personas de alrededor no conocen o entienden del todo las actividades que forman parte de las consignas de seguridad. En ocasiones, suelen confundirse las labores de un guardia de seguridad y se le piden apoyos para los que no están capacitados o, simplemente, no pueden realizar, pues descuidarían su lugar de trabajo, poniendo en riesgo la integridad de lo resguardado. Es en estos casos cuando un TSP debe estar lo suficientemente capacitado para hacerle saber a las personas que su función podría quedar vulnerable, al descuidar aspectos de las consignas que sí le corresponden por atender otros asuntos, siempre mostrándose amables y respetuosos, y haciéndole saber al otro que lo primordial es su seguridad.

Dependiendo de cada uno de los sitios que se encuentren bajo el resguardo de un TSP es que las tareas y controles se establecen, sin embargo, la capacidad de respuesta que deben tener ante cualquier situación debe ser inmediata, buscando en todo momento el bien de quien pudiera encontrarse en peligro. Es así que el TSP debe intervenir en los casos que atenten contra la integridad de alguien, manteniendo la firmeza de su postura y procurando que nadie resulte agredido, ya sea de manera verbal o física.

Para que la labor de los TSP se lleve a cabo de manera correcta, existe detrás de cada uno de ellos, y en todo momento, un equipo de respaldo. Desde el momento de su contratación hasta que llegan al lugar a resguardar, los colaboradores y áreas hacen posible, desde sus respectivas trincheras, que los TSP se encuentren listos para poner en práctica lo aprendido. Así mismo, es gracias a la apertura e involucramiento de sus aliados comerciales que la labor realizada día a día cada vez llega más lejos, haciendo que los TSP sean un ejemplo de trabajo, esfuerzo y constancia, no solo para la empresa, sino para la sociedad en su conjunto, además de ser el pilar de sus familias y un estandarte de confianza.

Hoy, Grupo IPS agradece a sus más de 5,000 colaboradores, a nivel nacional, por su constancia y dedicación, por la pasión que ponen día con día para llevar a cabo sus tareas, el compromiso que tienen hacia la empresa y, sobre todo, hacia sus familias, por las que todos los días se esfuerzan y constituyen el motor que los hace querer llegar más lejos. Los lazos que vinculan a cada uno de los colaboradores con su entorno son cada vez más fuertes y, pese a cualquier adversidad, la familia IPS continuará con la frente en alto y con la firme convicción de hacer personas de bien, dispuestas a trabajar con esmero y a convertirse en un ejemplo de calidad humana y humildad. Amable, pero firme: es una actitud que se debe poner en marcha a diario, por el bien de todos.

 

Marzo-Abril 2021

 

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